Niños claman por una escuela digna y segura en periferia de Acapulco.
HB Noticias
Por: Héctor Briseño.
Acapulco, Gro., (12/sep/2017). Niños de la escuela primaria matutina federal Plan de Ayala, ubicada en la colonia Emiliano Zapata, en la periferia del puerto, empezaron clases el actual ciclo escolar en pasillos y áreas comunes del plantel.
Hace cuatro años, Protección Civil municipal emitió un dictamen que señala que la infraestructura del edificio principal, de dos pisos, no puede ser utilizada, pues representa “alto riesgo”.
El olvido oficial.
Aproximadamente 600 niños que asisten al turno matutino, fueron distribuidos sobre la cancha de usos múltiples, jardineras, patios, andadores y acceso principal de la escuela para tomar clases.
El sismo del pasado jueves por la noche (7/sep/2017), de 8.2 grados, ocurrido frente a costas de Chiapas, incrementó la incertidumbre entre padres de familia y la plantilla laboral.
Madres de familia explicaron que papás se organizaron para pintar la escuela, y cuando acudieron a preparar las paredes, se percataron del desgaste, por lo que decidieron que los niños no tomen más clases en los salones.
En recorrido por el inmueble, se constató que existen fisuras en columnas, techos, castillos y paredes del edificio de 43 años de antigüedad.
Al menos dos salones y la dirección del plantel lucen con paredes cuarteadas.
Niños de primero “c” de primaria deben utilizar una mochila como pizarrón, mientras realizan algunas actividades sentados en el piso.
Un grupo de niñas efectúa actividades didácticas con resistol y palitos de madera bajo la cancha techada, y tres niños se acomodan en el interior de una portería de futbol con sus mochilas.
La escuela, designada por la autoridad como refugio temporal en caso de desastres naturales, carece de drenaje, pues la calle exterior fue construida un nivel más arriba, lo que provoca inundaciones en un sector del centro escolar.
Testimonio.
El director de la escuela, Ángel González Castrejón, expresó que “nuestra institución sufrió más daños con el sismo del pasado 7 de septiembre, se sacudió tremendamente”.
Recordó que tras el sismo de 6 grados del 21 de agosto de 2013, las paredes de las escuelas se cuartearon, y en esta ocasión se agrietaron más.
Subrayó que “el edificio no está en condiciones óptimas para laborar, los niños y los maestros sufrimos por nuestra integridad. Las columnas se agrietaron más con el último sismo, las trabes, los muros, por eso decidimos tomar clases afuera, para que el edificio (de dos pisos), no se nos venga encima”.
El director de la escuela Plan de Ayala reprochó que ha entregado oficios a autoridades educativas de Guerrero, sin respuesta alguna.
En el turno vespertino estudian aproximadamente 300 niños más.
Foto: Cortesía Ruby Montano.
Padres y estudiantes de la escuela Plan de Ayala bloquearon el bulevar Vicente Guerrero (12/sep/2017) para exigir salones seguros.